Otra razón para aprobar la reforma a las pensiones

María José Zaldívar

Contrario a quienes la daban por muerta, la Reforma a la Pensiones no solamente sigue viva, sino que retoma su protagonismo en medio de una semana de intenso debate legislativo.

El Gobierno ha puesto sobre la mesa un proyecto de Ley que -con un esfuerzo fiscal inédito en la historia del Sistema de Pensiones- compromete no sólo la aceleración del alza de los beneficios del Pilar Solidario, sino además un aumento de 20% en cobertura, para llegar así al 80% de la población de adultos mayores. En simple, esto significa sumar en 2021 un total de 506 mil personas a la protección del Pilar Solidario.

En tiempos en que se habla persistentemente de que el Gobierno no ayuda a las personas, vale la pena echar un vistazo al costo fiscal de la propuesta de pensiones en debate. El análisis del Consejo Consultivo Previsional -entregado el pasado 18 de septiembre-, estima que en 2021 el Estado incrementará su desembolso fiscal en 190.882 millones de pesos, lo que incluye los 150.692 millones de pesos por concepto de aumento de cobertura al 80%, y los 40.190 millones de pesos correspondientes al adelantamiento del alza de los beneficios.

El impacto en cobertura es tan relevante, que el mismo Consejo sugiere en su informe "estudiar la conveniencia de que la focalización adopte la forma de un test de afluencia como alternativa al sistema actual", para transitar a un sistema en que sea el propio Estado quien evalúe e identifique a quienes no seleccionaron elegibles, según detalla el documento. De esta manera, el sistema "podría mejorar y disminuir los costos asociados a la focalización, ya que en general el Estado posee más información administrativa de las personas de mayores ingresos y mayor riqueza", consigna el texto.

El proyecto de ley considera además un seguro de lagunas previsionales, haciéndose cargo de cambios drásticos en el mercado del trabajo como que el que vivimos el último año, asegurando el pago de cotizaciones de aquellos trabajadores afectados por la cesantía.

Las bondades del Proyecto de Reforma a las Pensiones y el esfuerzo fiscal que ello significa están a la vista, pero todavía quedan interrogantes importantes. El Consejo Consultivo mencionó la importancia de sumar datos sobre los efectos que pueden tener el aumento de la cobertura sobre los incentivos a cotizar y la formalidad en el trabajo, aunque considera que estos últimos números menores e incluso podrían netearse. Pero, uno clave será proyectar cuánto más costará a los chilenos el financiamiento de este robustecido pilar solidario si se aprueba un cuarto retiro, porque al haber menos ahorro, el Fisco tendrá que poner necesariamente más recursos por concepto de pensión básica solidaria y aporte previsional solidario.

Hoy tenemos en frente dos proyectos en direcciones contrarias respecto de un mismo tema. Les invito a juzgar cual de los dos está buscando un beneficio mayor para las personas, cual tiene una mirada de más largo plazo, cual busca a través de la solidaridad financiada a través de impuestos generales mejorar las pensiones; y cuál -en el lado opuesto- fomenta el uso individual de recursos, haciendo caso omiso de sus costos futuros. No hay duda de que allí hay una razón más para apoyar la reforma a las Pensiones y decir no a un nuevo retiro adelantado de fondos previsionales.